
Al verla llena y rebosante, como la espuma
del embravecido mar...
y sus olas amenazando, con desbordarse...
Pero más abajo, y con la misma
imaginación... Bebiendo mi café,
lento y sin apuros...
Porque es ahí en mis pensamientos,
Que en sentido figurativo, ellos forman
la espuma;
que quiere desbordar esa taza de mi
corazón.