PAUL MORPHY , de origen hispano/irlandés, y madre francesa. El ajedrez en la familia de Paul siempre fue una práctica de hombres, sus abuelos, padre, hermanos y tíos, practicaban el juego regularmente. Después de aprender por sí mismo el juego siendo un niño, observando a los miembros de la familia, fue considerado uno de los mejores jugadores deNueva Orleáns cuando aún tenía 9 años.
A los 12 años, Morphy ya era uno de los mejores jugadores de su Estado natal, atrayendo la atención como "niño prodigio". Después hizo giras por casi todas las grandes ciudades de Estados Unidos derrotando a todos sus adversarios, algunos mucho más experimentados. Llegó a dominar muy bien el inglés, el español, el francés y el alemán. El general Winfield Scott, gran juador de ajedrez en 1846, pensó que se estaba haciendo burla de él cuando se presentó Morphy como su oponente. Morphy lo derrotó con facilidad en dos partidos, el segundo de los cuales ya había terminado después de sólo 6 jugadas. Inclusive derrotó al gran maestro húngaro Johann Lowenthal en 3 partidos cuando éste visitaba los Estados Unidos, aunque inicialmente Lowental considerase la partida con el niño Morphy como "una pérdida de tiempo".
Cima del ajedrez
Morphy terminó la universidad muy joven a los 20 años y como no podía practicar la abogacía, (era necesario tener 21 años en los EE.UU. para hacerlo) se tomó un año para enfrentarse con los mejores jugadores de Europa, especialmente en los mayores centros ajedrecísticos de la época: París y Londres ganando una serie de torneos y matches hasta ser considerado el mejor jugador del mundo.
En 1858, había derrotado a todos los maestros ingleses, con excepción del británico Howard Staunton considerado oficiosamente como "mejor jugador del mundo", Pero Staunton se negó a aceptar el reto después de ver la obra del joven prodigio, pretextando otras ocupaciones. Seguidamente, Morphy viajó a Francia, donde derrotó fácilmente al jugador líder en Europa, el alemán Adolf Anderssen, a pesar de estar el estadounidense muy enfermo padeciendo una gripe intestinal. Morphy ganó 7 partidas, perdió 2 y empató 2 en el match contra Anderssen, por lo cual fue entonces considerado el "mejor jugador del mundo", a pesar de tener sólo 21 años.
Retiro
Morphy volvió a casa a inicios de 1859, siendo homenajeado repetidas veces en su patria, pero sin hallar algún ajedrecistaque aceptara enfrentársele; Morphy inclusive aceptó jugar contra cualquier retador de América o [{Europa]] otorgando a éste jugar con las piezas blancas y con ventaja de peón, pero nunca halló retador alguno pese a publicitar ampliamente su oferta. Amargado, Morphy se retiró del ajedrez, sólo jugando muy ocasionalmente con amigos cercanos.
El intento de Morphy de dedicarse a la abogacía quedró frustrado cuando en 1861 estalló la Guerra Civil estadounidense. Al hallarse toda la familia en Luisiana, el hermano mayor de Morphy se unió a las filas de la Confederación. Paul Morphy también pidió unirse a las tropas, siendo destacado como oficial de menor rango en el estado mayor del general P.G.T. Beauregard. El propio Beauregard lo mantuvo en su equipo para tareas menores, tras admitir la nula pericia de Morphy en cuestiones militares; tras pocos meses de campaña fue enviado al extranjero, viviendo en La Habana y París entre 1862 y 1867.
El fin de la guerra causó que Morphy y su hermano volvieran a su hogar, siendo que el ex campeón de ajedrez trató de nuevo de dedicarse a la abogacía. Morphy fracasó en su empeño pues su gran gama en el ajedrez eclipsó del todo sus esfuerzos para labrarse una carrera como abogado, siendo que el propio Morphy rehusaba dedicarse al ajedrez de modo profesional tras su amarga experiencia de inicios de la década de 1860. En esas fechas el ajedrez era considerado aún como actividad puramente amateur cercana al puro juego de azar, siendo mal visto en el entorno conservador de Morphy dedicarse al ajedrez de modo profesional.
Ultimos años
En 1867, la salud mental de Morphy comenzó a empeorar. Llegó a sufrir delirios persecutorios e incluso a odiar el ajedrez, al acusarlo de su infelicidad. En 1882 unos periodistas de Nueva Orléans fueron a su hogar a comunicarle que le incluirían en un libro sobre los "Grandes Personajes" de su ciudad natal por su dedicación y esfuerzo en la práctica del ajedrez. Morphy se enfureció al conocer el motivo del homenaje y les dijo: "Sólo he tenido un empleo ficticio y no tengo algo valioso para incluir en este libro".
Paul Morphy nunca se casó ni tuvo hijos, viviendo en sus últimos años gracias a la considerable fortuna de su familia. Murió el 10 de julio de 1884 en su casa, tras sufrir un ataque de apoplejía, con apenas 46 años de edad.