Para muchos, la obra cumbre de Bolaño es "Los detectives salvajes". No es un secreto que los dos principales protagonistas de esa novela, Arturo Belano y Ulises Lima, están inspirados en la vida del propio Bolaño y de su mejor amigo Mario Santiago. En la novela ambos eran lectores ávidos que presentaban obras a los concursos literarios e improvisados detectives en busca de Cesárea Tinajero. Arturo Belano entre muchas otras actividades dentro de la novela fue vigilador nocturno en un camping de Barcelona y cuenta algunas situaciones de esa actividad. Creo que también he leído algún cuento de Bolaño donde el protagonista era vigilador nocturno pero no recuerdo el nombre. Lo dicho; como tantos otros escritores, solía escribir de lo que conocía, y conocía de escritores, de literatura, de exilios y de vigilancia nocturna, y también de lo que le interesaba como investigaciones y detectives. Pero tampoco significa que no escribiera de otras cosas, como putas asesinas, o gauchos insufribles. Para apreciar a los grandes escritores no es imprescindible identificarse con sus personajes, con los ambientes y con las circunstancias. Quizás Leopoldo María Panero no sea tan grande y puedan apreciarlo solamente aquellos que se identifican con su estilo de vida.
En una de las memorables entrevistas a Bolaño, Mónica Maristain le preguntó si había vertido alguna lágrima por las numerosas críticas de sus enemigos y respondió lo siguiente:
Muchísimas, cada vez que leo que alguien habla mal de mí me pongo a llorar, me arrastro por el suelo, me araño, dejo de escribir por tiempo indefinido, el apetito baja, fumo menos, hago deporte, salgo a caminar a orillas del mar, que, entre paréntesis, está a menos de treinta metros de mi casa, y les pregunto a las gaviotas, cuyos antepasados se comieron a los peces que se comieron a Ulises, ¿por qué yo, por qué yo, que ningún mal les he hecho?
La obra de Bolaño es muy extensa y sus protagonistas tienen características variadas. Pero entre ellos se dan con mayor frecuencia los detectives o policías que los escritores. Hasta tiene de protagonista una rata policía. Los protagonistas de sus novelas casi siempre están buscando a alguien o investigando algo. Él mismo, muchas veces dijo que le hubiera gustado ser detective de homicidios, mucho más que escritor.
Pero bueno, lo lógico y normal es que los escritores tengan tendencia a escribir sobre las cosas que conocen o que les interesan. Bolaño era escritor y un erudito de literatura, como lo era Borges. Ambos escribieron bastante sobre escritores.
Pero no es cierto que las únicas personas que leen cuentos son los aspirantes a escritor. Por ejemplo Leopoldo María Panero que es freak, drogadicto, homosexual, estuvo preso, e internado en psiquiátricos evidentemente escribe para ese tipo de gente, no para aspirantes a escritor. El mismo Bolaño en esa entrevista de Mónica Maristain decía:
¿Ha tenido miedo alguna vez de sus fans? He tenido miedo de los fans de Leopoldo María Panero, el cual, por otra parte, me parece uno de los tres mejores poetas vivos de España. En Pamplona, durante un ciclo organizado por Jesús Ferrero, Panero cerraba el ciclo y a medida que se aproximaba el día de su lectura la ciudad o el barrio donde estaba nuestro hotel se fue llenando de freaks que parecían recién escapados de un manicomio, que, por otra parte, es el mejor público al que puede aspirar cualquier poeta. El problema es que algunos no sólo parecían locos sino también asesinos y Ferrero y yo temimos que alguien, en algún momento, se levantara y dijera: yo maté a Leopoldo María Panero y después le descerrajara cuatro balazos en la cabeza al poeta, y ya de paso, uno a Ferrero y el otro a mí.
Interesante el perfil de los fans de este hombre:
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